Eramos dos locos parando en los portales,
buscándonos a tientas con las manos
y robándole en secreto destellos a la luna.
Fuimos dos tintos con naranja.
Fuimos dos niños y una canción,
una de una rubia y un rebelde,
una de irse lejos.
Fuimos dos almas de cuerpo entero
cuando nuestros cuerpos aún no estaban ni acabados.
Fuimos un renglón en blanco y un "te espero".
Fuimos despedidas de estación,
y cuando menos lo esperábamos
fuimos el pájaro y fuimos el vuelo
y después de todo resultó
que nos creíamos uno, pero siempre
fuimos dos.
Loreto Liz (Lilith)
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